Alumnos fueron premiados en el Concurso Interamericano de Derechos Humanos

Siete estudiantes de la Facultad de Derecho (FDER) viajaron a Washington para participar en la trigésima edición del Concurso Interamericano de Derechos Humanos y obtuvieron el primer premio al mejor memorial de la representación del Estado en español
Alumnos fueron premiados en el Concurso Interamericano de Derechos Humanos

Una delegación de siete alumnos de la FDER participó entre el 18 y el 23 de mayo en Washington D.C. de la trigésima edición del Concurso Interamericano de Derechos Humanos: el único certamen trilingüe (inglés, español y portugués) dedicado a entrenar a estudiantes de Derecho en el uso del Sistema Interamericano como instancia legítima para reparar violaciones de derechos humanos.

Con el tema “Trata de Personas y Derechos Humanos”, más de 65 universidades de todo el mundo debatieron un caso hipotético mediante memoriales escritos y alegatos orales ante expertos que actuaban como jueces de la Corte.

Una actuación premiada

La UM viajó al concurso con un equipo de siete estudiantes (Jerónimo Uriarte, Sofía Borrelli, Rosina Deleón, Julieta Palermo, Lara Delfino, Valeria Baldassini y Fermín Alonso), guiados por los coaches Pablo Donnangelo y Sofía Maruri. Jerónimo y Sofía fueron elegidos oradores oficiales y compitieron en audiencias contra delegaciones de Colombia, India y México. Su esfuerzo se coronó con el primer premio al mejor memorial en español por la representación del Estado.

Para Jerónimo, “representar a la UM y, por ende, a Uruguay, en un concurso con alrededor de 60 universidades, fue un orgullo inmenso. La Universidad demuestra una y otra vez que está a nivel internacional”. Sobre la preparación de sus alegatos orales, contó: “Intentamos enfocar los alegatos como un discurso, con todos los recursos retóricos y persuasivos necesarios para convencer al Tribunal. Fue muy interesante ir adaptando nuestros alegatos luego de cada ‘partido’, porque demuestra que cada intervención nuestra y de la contraparte, al igual que cada pregunta de los jueces, fue una oportunidad para aprender y profundizar en los pormenores del caso”.

Sofía recordó cómo dividieron sus roles y se apoyaron mutuamente: “Ensayamos un montón y dividimos los argumentos según las fortalezas de cada uno; practicamos con los coaches y el resto del equipo, quienes nos hacían preguntas para prepararnos de cara al interrogatorio de los jueces. Escribimos y reescribimos los alegatos (incluso en Washington después de cada partido) y revisamos cada detalle, desde el contenido hasta el lenguaje corporal”.

Su mayor aprendizaje, afirmó, fue entender que “el Derecho no es solo teoría, sino una herramienta de impacto real” y que incluso bajo la presión internacional “con preparación, compromiso, trabajo en equipo y pasión se puede sostener una posición jurídica con seguridad”.

Alumnos fueron premiados en el Concurso Interamericano de Derechos Humanos

El caso sobre el que trabajaron se publicó en diciembre, y desde entonces los estudiantes y sus asesores se reunieron semanalmente para preparar su intervención en el concurso.

Julieta, otra de las alumnas de la delegación, fue suplente y se enteró que iba a participar apenas una semana antes del viaje. “Fue una oportunidad que me apareció y en el momento decidí aprovecharla y no me arrepiento en absoluto. Me lo demostró el recibimiento de mis compañeros y de los profesores al momento de incluirme”, explicó.

“En mi rol de suplente me encargué, junto con otra compañera, de anotar todas las preguntas que hicieron los tribunales, tanto a nuestro equipo como a los contrarios. Nos fijábamos en las caras de los jueces al mencionar un argumento y fue un trabajo de análisis constante que, después, con más tranquilidad, revisábamos y usábamos para mejorar nuestros alegatos. Parece un trabajo invisible a la vista de otros, pero es intrínseco al desarrollo”, agregó.

Alumnos fueron premiados en el Concurso Interamericano de Derechos Humanos

Rosina Deleón también formó parte del grupo y su rol consistió en colaborar en la etapa de análisis del caso, así como en la investigación y redacción de los memoriales. "También apoyé activamente en la preparación de los oradores titulares, ya que integraba el equipo como oradora suplente. El proceso de preparación fue exigente, pero sumamente enriquecedor. Además de ser una etapa que me permitió profundizar y perfeccionar mi conocimiento acerca del sistema interamericano de derechos humanos, se formó un muy buen grupo de trabajo: nos apoyamos mutuamente, nos reímos mucho incluso en los momentos de más presión y logramos construir un ambiente de compañerismo que hizo que todo el esfuerzo valiera la pena", afirmó.

Más allá de la competencia
La delegación aprovechó su estadía para visitar el Capitolio, la Casa Blanca, la Suprema Corte de Justicia y la Biblioteca del Congreso. También tuvieron un encuentro privado con Jean Michel Arrighi, secretario de Asuntos Jurídicos de la OEA, quien les ofreció un recorrido por la sede de la organización y compartió su experiencia de tres décadas en el Sistema Interamericano. “Nos parecía mentira que nosotros, simples estudiantes, nos sentáramos junto a él, a pocas cuadras de la Casa Blanca, para hablar de Derecho”, concluyó Jerónimo.

Con este galardón, la UM confirma su compromiso con la formación práctica en Derechos Humanos y el nivel de excelencia de sus estudiantes en escenarios globales.