Se presentó el Índice de Felicidad Laboral

SSOL, el IEEM y CPA FERRERE presentaron los resultados del Índice de Felicidad Laboral (IFL) Uruguay 2025. El estudio revela que 7 de cada 10 trabajadores se declaran felices en su trabajo, pero cuando se analizan las distintas dimensiones que componen el bienestar laboral, el IFL muestra un panorama más desafiante: 52,3% de los trabajadores presenta niveles bajos de bienestar, 42,6% se ubica en un nivel moderado y solo 5,1% alcanza niveles altos.
El estudio se enmarca en el trabajo que, junto a CPA FERRERE y SSOL desarrolla el Centro de Estudios de la Felicidad del IEEM, presentado este año y dirigido por la profesora Patricia Otero. El IFL, basado en 3.284 casos en los 19 departamentos del país, se proyecta como un indicador anual que permitirá monitorear la evolución del bienestar laboral en Uruguay y acompañar a las organizaciones en la construcción de entornos más positivos, productivos y sostenibles.

Los más y los menos felices
El estudio reveló que la diferencia entre la felicidad declarada y el bienestar medido evidencia la importancia de evaluar no solo la percepción general, sino también las condiciones, experiencias y factores que influyen en el día a día del trabajo. De acuerdo con ls datos, los empresarios, independientes, gerentes y directores registran los mejores niveles de bienestar. En cambio, los empleados públicos son el grupo “menos feliz”: 57% tiene un IFL bajo y solo 3% alcanza niveles altos, la peor situación entre todos los segmentos. El personal administrativo y operativo también concentra niveles bajos de bienestar.

Entre los hallazgos se destaca, asimismo, que 72% de los trabajadores siente que el propósito de su organización hace su trabajo relevante. Los tres aspectos más valorados por los trabajadores uruguayos son: el horario laboral y días de descanso, el compañerismo y equipo de trabajo, y la infraestructura y confort.
El análisis reveló que existen brechas por género, región, ingresos y tipo de empleo, y que Montevideo presenta mejores niveles de bienestar que el interior.
“Uruguay necesitaba un indicador serio, comparable y basado en evidencia para hablar de bienestar laboral. El IFL llega para ordenar la conversación y ayudar a que las organizaciones tomen decisiones con datos”, aseguró Santiago Legarra, director de SSOL. Su socio, Danilo Croci, indicó que “este estudio es un insumo que las empresas puedan construir ambientes más saludables, motivadores y sostenibles. Es una hoja de ruta concreta para la acción”.

“La felicidad en el trabajo es un motor estratégico de resultados y de sostenibilidad. Investigaciones de Harvard y Oxford demuestran que cuando mejora el bienestar laboral, mejora el desempeño financiero, la productividad, la creatividad y la retención”, señaló Patricia Otero, directora del Centro de Estudios de la Felicidad (CEF) del IEEM. Y agregó: “En un mundo donde solo el 21% de los empleados está comprometido y casi la mitad de los uruguayos busca un cambio laboral, el bienestar ya no es un ‘tema blando’: es un indicador de competitividad y futuro”.
“El IFL confirma una brecha marcada entre sectores: los empleados públicos registran los niveles más bajos de bienestar, reflejando desafíos estructurales en condiciones de trabajo, reconocimiento y oportunidades de desarrollo. En contraste, empresarios, directivos, gerentes y trabajadores independientes muestran mejores resultados, seguidos por supervisores y técnicos especializados. El aspecto positivo es que los líderes -quienes tienen la responsabilidad de definir e implementar políticas- cuentan ahora con una métrica que orienta transformaciones para mejorar el bienestar y la productividad, así como para fortalecer las encuestas de clima organizacional”, señaló por su parte Gonzalo Icasuriaga, socio de CPA FERRERE y director de Consultoría en Talento y Transformación Organizacional.
Buenas prácticas
En un panel posterior a la presentación del estudio Carla Brovetto, gerenta de felicidad en Thaloz, explicó cómo el rol de CHO -Chief Happiness Officer- es estratégico desde el origen de la compañía y está profundamente integrado a su forma de operar. Comentó que, en una organización 100% remota y de estructura horizontal, tienen el desafío de generar cercanía real y una experiencia coherente para todas las personas. Para lograrlo, combinan procesos claros, rituales culturales y una presencia constante del área de Felicidad, que incluye reuniones uno a uno con sus casi cien colaboradores para asegurar escucha activa, acompañamiento y una medición continua del impacto del trabajo en la experiencia de quienes integran la empresa.

En tanto, Alex Malachowski, gerente general de Nuevocentro Shopping, compartió cómo han logrado construir una cultura sólida en un negocio con una dinámica intensa, horarios rotativos y una operación que funciona casi de continuo todo el año, incluso sin contar con un área formal de RRHH. Destacó que las prácticas clave han sido la cercanía diaria con los equipos, el liderazgo accesible, la comunicación transparente y el seguimiento constante del clima laboral. Subrayó que el objetivo es que la cultura se transmita a través de valores y procesos compartidos que permiten sostener en el tiempo niveles muy bajos de rotación.
